10 y 11 de agosto
Parroquia de Nuestra Señra Reina del Mundo, Cabinda
“Educación para la Ciudadanía” fue el tema del Seminario que MOSAIKO| Instituto para la Ciudadanía facilitó, los días 10 y 11 de agosto, en la Parroquia Nuestra Señora Reina del Mundo, Catedral de Cabinda.
Estaba prevista la participación de cerca de 100 personas, pero acabaron por aparecer a la formación más de 300, que se desplazaron a la Catedral para escuchar a Fray Mário Rui Marçal y Barros Manuel, miembros de MOSAIKO y orientadores de este primer seminario facilitado por el Instituto, en Cabinda.
El tema principal, “Educación para la Ciudadanía”, se inserta en el cronograma de las actividades conmemorativas, por la fiesta de la patrona de la Parroquia. Siendo la principal preocupación del equipo organizador: responder a las necesidades de los fieles e invitar a la reflexión sobre cuestiones de realidad social.
La iniciativa de este seminario en la Parroquia Nuestra Señora Reina del Mundo, tuvo como equipo organizador al equipo de Pastoral Social, encabezado por el Padre Celestino Roque Vemba y por la hermana María Anastácia de la Congregación Mercedarias de la Caridad.
El primer día, se centró en la comunicación hecha por Fray Mário Rui Marçal, que comenzó por explicar los conceptos de Ciudadanía y Derechos Humanos, así como la relación existente entre ellos. Seguidamente, se dedicó a reflexionar, acerca de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, defendiendo que está no vino a crear derechos pero, sí, reconoce los derechos que son inherentes a las personas desde su existencia.
Al día siguiente, Barros Manuel, abordó el tema “Derechos Civiles y Políticos”, comenzando por definir los Derechos Civiles y los Derechos Políticos. Hizo un análisis de los referidos derechos, encuadrándolos en la Constitución de la República de Angola, en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en el Pacto Internacional de los Derechos civiles y políticos.
Sin embargo, el mayor énfasis fue dado a los Derechos Políticos, más concretamente al derecho a participar en la vida pública, considerando que “la participación de los ciudadanos en la vida pública es un derecho y un deber. Es importante que los ciudadanos participen y esto se hace de diferentes maneras: partidos políticos, individualmente o a través de grupo, asociaciones u organizaciones“
Barros Manuel citó, además, algunos medios por los cuales los ciudadanos pueden participar en la vida pública “a través de los medios de comunicación, promoviendo iniciativas que favorezcan el bienestar de la comunidad, participando en los Consejos de Auscultación y Concertación social, presentando sugerencias y reclamaciones junto a otras instituciones“.
En conclusión, añadió que “la participación en la vida pública constituye una invitación a conciliar derechos y deberes en el seno de la sociedad, siendo una dimensión fundamental para combatir de forma constructiva las enormes desigualdades sociales y para promover un espíritu de concertación y respeto en la resolución de los conflictos“
Por otro lado, Fray Mário habló conjuntamente de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales, justificando su designación (DESC) y nombrando las leyes que los consagran, así como de la razón de que éstos derechos no sean “judiciales”. En esta secuencia, paso a analizar cada uno de los derechos, defendiendo en el caso del derecho al trabajo que “el trabajo debe promover el desarrollo, pero se trata de un desarrollo humano”. En lo relativo al derecho a la vida científica y cultural, destacó: “hay aspectos de la cultura que deben mantenerse, pero hay otros que, por su descontextualización, deben ser abandonados“
Al final, Fray Mário Rui Marçal concluyó que “un aspecto importante a considerar es el proceso de transmisión de la cultura a las nuevas generaciones que implica la responsabilidad de los más viejos y la apertura de los más jóvenes”